En el momento de evaluar habrá que
intentar:
ØCaptar
su atención.
Ø
Ganar la confianza (tono, actitud, proximidad física, comprensión, aceptación,
etc.)
ØMantener
una comunicación verbal y no verbal adecuada.
ØConseguir
la mayor información posible.
ØObservar
la respuesta emocional.
ØNo
alarmar.
Para ello utilizaremos las habilidades
del terapeuta para la comunicación.
El
objetivo en esta fase es conseguir una valoración general del paciente:
Como
fue su funcionamiento durante el incidente y su estado actual, permitiendo
establecer, sobre la base de algunos indicadores conocidos, el riesgo de un
posterior desarrollo de los trastornos anteriormente mencionados y ayudarle a
encontrar sus propias resistencias para superar la crisis y sacar el mejor
provecho posible a la experiencia vivida.
Para
ello deberá obtenerse información sobre cinco puntos importantes: Suceso
precipitante. Contexto en que ocurre la crisis. Funcionamiento durante la
crisis. Funcionamiento de la persona antes de la crisis. Situación actual.
Solicitaremos
unos datos mínimos para comenzar con la anamnesis, la cual iremos completando
según avance la sesión.
Habrá
que ir haciendo un repaso por el denominado Perfil CASIC, viendo el estado de
las áreas Conductual, Afectiva, Somática, Interpersonal y Cognitiva. Esto es,
en esta primera valoración se busca conocer el estado del paciente mediante el
examen de cinco funciones psicológicas básicas: Emociones, reacciones
fisiológicas, aspectos cognitivos, comportamentales y relaciones sociales, que
nos ayude a detectar la gravedad y dimensión del problema.
•
Aspecto conductual: Patrones de trabajo, juego, pasatiempos, ejercicios,
hábitos alimentarios, conducta sexual, hábitos de sueño, uso de drogas,
tendencias suicidas u homicidas, etc.
•
Aspecto afectivo: Sentimientos sobre cualquiera de las conductas mencionadas
anteriormente como ansiedad, cólera, alegría, depresión, y ver si los afectos
son adecuados a las circunstancias de vida. Averiguar también si los
sentimientos se expresan u ocultan.
Ø
Aspecto somático: Funcionamiento físico general, salud. Tics, dolores de
cabeza, malestares estomacales o de otro tipo, estado de relajamiento o
tensión, sensibilidad de la visión, audición, tacto, etc.
ØAspecto
interpersonal: Naturaleza de las relaciones con la familia, amigos, vecinos,
compañeros de trabajo, dificultades y fortalezas en los vínculos. Cantidad y
frecuencia del contacto con amigos y conocidos.
ØAspecto
cognoscitivo: Sueños actuales diurnos o nocturnos, imágenes mentales del pasado
o el futuro, propósitos en la vida y razones de su validez; creencias
religiosas, filosofía de vida; delirios, alucinaciones, diálogo interno
irracional, racionalizaciones, ideación paranoide y actitud general hacia la
vida
Narración del suceso:
•Preguntaremos
por el nombre, edad, profesión, tipo de incidente sufrido.
•
Averiguaremos si es víctima directa o indirecta y las pérdidas más graves que
ha tenido (fallecimiento de personas cercanas, pérdidas materiales importantes
o consecuencia más grave percibida).
• Le
haremos saber nuestras condolencias por lo acaecido y mostraremos nuestra
empatía con sus circunstancias.
•
Continuaremos favoreciendo la narración del suceso. Idealmente intentaremos que
lo haga de una forma cronológica, centrándose en los hechos y con el mayor lujo
de detalles posibles.
•No
interrumpiremos, a no ser que veamos que empieza a divagar o a apartarse de una
narración hilada. En este caso, volveremos a centrar la historia por el punto
en donde se desvió para que la retome (me decía que…, entonces cuando… que
pasó, etc.).